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Arquitectos: CutscapeArchitecture
- Área: 280 m²
- Año: 2014
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Fotografías:Wang Yi, Zhang Hetian, Chen Su
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La Casa del Té de la muralla roja, está situada en el interior del edificio del Gran Salón del Pueblo, que solía ser el Templo Ancestral, un templo conmemorativo de antepasados de la realeza al sudeste de la Ciudad Prohibida. La pared del palacio en el lado este del templo, es parte del cierro perimetral alrededor de la Ciudad Prohibida como un segundo anillo mural, por el que Tian'an Men funcionó como la entrada principal. El muro había sido durante mucho tiempo un símbolo de la división de clases sociales en la antigua China, ahora no es más que un umbral que separa el jardín imperial de las casas de Hutong al este. Durante la transición de autoridad, daños indocumentados derrumbaron la mitad norte de la muralla.
El proyecto de renovación se llevó a cabo en el sector dañado del muro. Dos almacenes en mal estado estaban abandonados, uno adosado al muro imperial rojo y el otro a unos tres metros de distancia al el norte del primero. Como una reacción inmediata de diseño, el techo del primer almacén fue retirado para revelar el cuerpo de la pared del palacio en el lado de Hutong. A continuación, un grupo de salones de té con estructuras de acero independientes, fueron insertados en el medio del "jardín sin techo” formando patios entre las antiguas y las nuevas estructuras. El exterior de la Casa del Té situada al norte, que se había preservado en mejor estado, fue aislada con un nuevo material de cubierta. Su interior fue abierto para acomodarlo a las nuevas necesidades programáticas. Es entonces, a través de tal interacción entre lo antiguo y moderno, entre volumen y vacío, entre tradición y modernidad, y entre solemnidad y lo absurdo, que lecturas sin precedentes sobre el ambiente local comenzaron a surgir.
La Casa del Té se compone de siete habitaciones únicas visualizándose entre sí, que muestran una forma de división celular. Los visitantes deben ingresar a los recintos a través de puertas y aberturas de ventanas en la pared de ladrillo. Nuevas estructuras vuelven a crecer en bio-células como una metabolización a escala urbana. En el umbral donde el sublime jardín real se encuentra con la austera vida cotidiana de Hutong, el gesto arquitectónico es inestable, siempre cambiante en una situación de reajuste y adaptación. La ceremonia del té es sólo un tipo básico de actividad. Eventos sociales ocasionales tales como, exposiciones de arte, subastas de caridad, ceremonias de festival, etc., tienen la capacidad para atraer a los residentes locales más cerca del entorno de la construcción tradicional, mientras que inyectan valores modernos al disfuncional templo antiguo.
Como material principal en la fachada, se utilizaron planchas de acero inoxidable bruñido y paneles de cristal, colocados en diferentes ángulos reflejando la muralla roja del palacio y su condición original. Cuando uno accede al patio, se aprecia la gran altura de la sólida pared de ladrillo del palacio, reflejada en el exterior de la Casa del Té, a escala humana, como si muchas piezas del muro del palacio estuviesen liberadas en el patio. Los materiales modernos no tienen por objeto establecer autonomía, sino tratar el patrimonio cultural con respeto. El interior de los salones de té fue terminado con hojas de bambú, mármol blanco, cobre y tubos de acrílico. Cada recinto adopta un carácter único, logrando desmembrar la arquitectura en pedazos más pequeños. La experiencia de recorrer el interior de la Casa del Té, se percibe efectivamente como un caminar a través de un pueblo, como si la magnitud del espacio total aumentara su tamaño.